¡Regala jamón!

Ya llegó la temporada de regalar o quedar bien con algún contacto de negocios, un familiar o una amistad. Además de los vinos, el jamón ibérico es otra opción para regalar al considerarse un producto de lujo, buena calidad y sobre todo muy apetecible prácticamente para todos.

El ibérico tiene ciertas diferencias con otros jamones curados como con el famoso serrano, que también es excelente.

El jamón ibérico tiene denominación de origen en España y entre las reglas que hay que cumplir es que la materia prima sea cerdo ibérico de raza negra alimentado con bellotas.

Como las bellotas no se dan en cualquier lugar de España la zona es restringida y por lo general se limita a ciertas áreas del centro y norte de este país. Gracias a esta materia prima se obtiene una calidad, sabor y textura de jamón que difícilmente es imitable.

Adicionalmente, en el ibérico es fácil encontrar un código de barras que ayuda a saber de dónde proviene la pata y su trazabilidad.

También hay subcategorías como el cebo que son cerdos criados en granjas, los recebo que también vienen de granjas pero ocasionalmente comen bellotas y los bellota que son cerdos en el campo que se alimentan de este producto.

Por otro lado, el jamón serrano es un producto derivado de cerdos blancos alimentados a base de granos y pienso (alimento seco).

Siempre hay que tener en cuenta que un jamón se elabora con las patas traseras del animal, porque lo que se obtiene de las delanteras se le llama paleta. Ambas son muy buenas, aunque un jamón suele ser de mayores dimensiones y de mejor calidad.

Un jamón pata negra o jabugo, no necesariamente significa mayor calidad, sólo describe una propiedad física del producto o de una región productora.

En La Naval tenemos la marca Fermín, que promueve el reconocido chef español José Andrés, y que maneja tanto jamones como paletas, en diferentes dimensiones y presentaciones para hacer un regalo que haga agua la boca al destinatario.

Busca estos productos en nuestra página web www.lanaval.com.mx y las siete sucursales de La Naval en la Ciudad de México.

 

Ibérico o serrano

Entre los jamones curados hay diferencias variadas que tienen que ver con la calidad del producto, pero sobre todo con su origen. Jamones serranos o ibéricos no son necesariamente tienen grandes diferencias, pero si no las conoces te decimos sus distinciones.

El jamón ibérico tiene denominación de origen en España y entre las reglas que hay que cumplir es que la materia prima sea cerdo ibérico de raza negra alimentado con bellotas.

Mientras que el jamón serrano es un producto derivado de cerdos blancos alimentados a base de granos y pienso (alimento seco).

Otra distinción es que el jamon proviene de las patas traseras del cerdo y se aprecia más que las paletas, que son las patas delanteras.

En el caso del jamón ibérico es fácil encontrar un código de barras que ayuda a saber de dónde proviene la pata y su trazabilidad.

Ya dentro de los ibéricos hay categorías como el cebo que son cerdos criados en granjas, los recebo que también vienen de granjas pero ocasionalmente comen bellotas y los bellota que son cerdos en el campo que se alimentan de bellotas.

Un jamón pata negra o jabugo, no necesariamente significa mayor calidad, sólo describe una propiedad física del producto o de una región productora.

Recuerda que la marca Fermín maneja jamón ibérico que puedes adquirir en nuestras sucursales en el formato de pata o loncheado.