¿En realidad son mejores los vinos orgánicos que los regulares? Depende mucho del enfoque que se le dé, pero los vinos orgánicos tienen algunos elementos que la gente cada vez busca más y sobre todo las generaciones más jóvenes.
Como el nombre lo dice, lo orgánico radica en que hay un mayor cuidado del vino desde el viñedo, pero no se trata de un concepto fácil, ni barato.
La idea es que el vino sea “más limpio” que un vino regular y que no contenga sustancias que a la larga puedan afectar al humano, por ejemplo un vino orgánico podría causar menos dolores de cabeza a quienes son más suceptibles a los sulfitos que se llegan a agregar.
En principio se debe reducir o incluso eliminar el uso de químicos en el tratamiento de las plantas. Es importante saber que hay químicos autorizados y que no siempre se pueden erradicar, pero de todas maneras lo que puede afectar al humano es demasiado bajo.
No se debe afectar demasiado al entorno de los viñedos, es decir la flora y la fauna local, porque muchas veces también tienen relación con el desarrollo de la vid.
Algunos derivados del azufre y de otros químicos sí están autorizados en vinos orgánicos, pero tiene qué ver más la proporción en que se usan. Sobre todo porque siempre debe haber un balance entre que el vino esté bien y que la viña no sea afectada por alguna enfermedad o plaga.
Incluso hay muchas bodegas que sin tener una certificación orgánica, siguen prácticas de este estilo. Lo que sucede es que la certificación es cara y debe renovarse anualmente porque no es de una vez y ya.
En este mes, la bodega chilena Viña Las Niñas ofrece vinos orgánicos de alta calidad que lo que resta de julio te bonifican el 20% de su costo en tarjeta Almirante. Si no cuentas con la tarjeta puedes adquirirla en nuestras siete sucursales y disfrutar de estas etiquetas del famoso valle de Apalta.